TE ENTREGO MIS ALAS

CAPITULO1:

E MUERTO…… PARA VOLVER A NACER

viernes 13 de marzo del 2015  00:00 P.M

Era media noche y en un callejón  se encontraba un muchacho en el frio suelo. Lo único que se podía contemplar era un cuerpo pudriéndose, casi un cadáver, lo único que lo mantenía con vida era que no dejaba de pensar en lo que le pasaría su hermana.

El cuerpo seguía respirando, con dolor su pecho se movía de arriba abajo, aplastando sus pulmones, ahogándose con su propia sangre.

De entre todos sus pensamientos, su mente voló a donde todo empezó, ósea esa misma mañana.

Viernes 13 de marzo del 2015 7:20 A.M

Era un hermoso día, el sol se colaba por las ventanas de una oscura habitación en la cuidad de Londres. Un muchacho de 16 años, cabellos negros cual noche, ojos azul zafiro y piel ligeramente bronceada se encontraba despertando con pesadez, estirando su mano para poder apagar el estruendo que provocaba su despertador.

Y así comenzaba otra monótona mañana, se levantaba, se cambiaba de ropa para ir al colegio, iba al cuarto de su hermana a levantarla, bajaba a preparar el desayuno y se iba a la parada de autobús de la esquina.

Ya dentro todo era lo de siempre, era un verdadero caos y destrucción, los mismos matones de siempre, las mismas zorras de siempre, los mismos nerds de siempre, toda su vida era una ruin y constante rutina.

Las clases, ni se diga, las maestros testarudos, las maestras ancianas amargadas de la vida, bla, bla, bla. El receso no mejoraba las cosas.

Se fue a sentar debajo de un árbol que se encontró, estaba aislado de la gente, se recostó hay y se quedo casi dormido, y lo hubiera hecho de no haber sido por una voz que el ya bien conocía y era una voz que calmaba su mente y su corazón. Se trataba de su amiga de la infancia, Caroline.

Una muchacha de 16 años, cabellos negros con franjas violetas, ojos grises y piel pálida.

Caroline –hola Jack, que cuenta la vida?- dijo sentándose a su lado

Jack –ja-

Caroline –dije algo chistoso?-

Jack –no, es solo que apenas me vengo a percatar de lo monótona que es mi vida-

Caroline –que esperas que te pase?, así es la vida-

Jack –si, supongo que tienes razón-

Caroline –la tengo, así como se que iras al cine conmigo esta noche-

Jack  -y como sabes que voy a ir?-

Caroline –porque te voy a insistir hasta que accedas a mi humilde petición-

Y con eso siguió transcurriendo el día de forma normal. Llego a su casa, hizo su tarea, se cambio de ropa, comió sobras de ayer y se quedo espero noticias de su hermana.

15 minutos después paso por la puerta una pequeña y triste niña de 8 años, cabellos cortos castaños, piel clara, ojos chocolate y lentes.

Jack –llegas tarde-

Allison –tenia cosas que hacer-

Jack –pero te vienes en transporte-

Allison –hoy decidí venir caminando-

Su hermana antes era feliz al igual que el, pero claro eso fue cuando sus padres aun vivían, ahora viven solos pero bajo la custodia legal de su tía Annette.

Al dar las 8.00 P.M. salió de la casa rumbo al cine  para encontrarse con su amiga. La película fue de ciencia ficción (el tema favorito de Caroline) cada quien tomo rumbo a su casa.

En el camino Jack se encontró con una viejecilla que según, necesitaba ayuda para llevar un par de bolsas pesadas a su casa, lo que Jack no sabia es que era una trampa. Jack se percato de que se encontraba caminando sin rumbo alguno, a veces hasta llegaba a dar vueltas en la misma cuadra, se voltio para encarar a la viejita pero lo que le esperaba era un sujeto disfrazado con un arma en la mano.

¿? –te divertiste niño?-

Jack –pero que?-

¿? –solo dame tu dinero- decía mientras más lo acorralaba contra una pared

Jack –no pudiste hacer eso desde un maldito principio?-

¿? –es que es divertido ver su cara de inocencia al ver a esta pobre ancianita-

Jack –“maldición, como saldré de esto?”-

¿? –no te gustaría saber que hay en las bolsas niño?-

al oír eso Jack con un gran miedo y manos temblorosas se dispuso a abrir las bolsas, encontrándose con cuerpos desmembrados y una gran peste a cadáver.

¿? –muy pronto, tu te sumaras al montón-

Jack intento salir corriendo pero el sujeto le disparo 2 veces en la espalda, dejándolo desangrando en el suelo, intento seguir avanzando pero le pisaron la mano, el sujeto tomo una daga que tenia guardada en su disfraz y empezó a apuñar a Jack. Se estaba quedando sin aire, no podía respirar, sentía como se le oprimían los pulmones, como su sangre recorría su piel.

Ya estando apunto de darle el golpe final escucho las sirenas de la policía y dejando a su victima de lado, salió corriendo.

Así fue como comenzó todo, maldiciendo su vida, para después arrepentirse de no haberle dicho a su hermana que el asesino de sus padres no había sido una enfermedad si no un ladrón, justo como le estaba sucediendo a el, acaso era su castigo por jamás haberle dicho a su hermana?, porque todo esto tenia que pasarle a el? Se cuestionaba el pobre chico.

Su vida estaba pasando frente a sus ojos, estaba listo para pasar a la siguiente vida, si es que le quedaba un futuro al cual anhelar.

Justo cuando creyó que el ángel de la muerte vendría a por el escucho una fría y malévola voz, era la voz de una joven, pero quien?.

¿? –oye!!-

Jack –“eh?”- solo podía mover los ojos

¿? –necesitas ayuda?- dijo sonriéndole –yo te puedo ayudar, solo necesito tu firma aquí-

dijo mostrándole un contrato extenso que llegaba hasta su  mano –lo único que tienes que hacer, es poner tu dedo ensangrentado hay, y salvare tu vida-

Jack de verdad lo pensó, claro que supo que se trataba de un demonio, que clase de ángel te pide una firma de sangre para salvar tu vida?, pero a pesar de eso, quiso firmar, de verdad quería, porque, que pasaría con su hermana?, quien la cuidaría?, quien seria la compañía de Caroline en los descansos?, quien mas viviría su monótona vida?.

¿? –vamos que esperas?, aunque no es obligatorio, pero……- hizo una pausa, como si estuviera analizando su siguiente movida –me vas a decir que de verdad morirías satisfecho?, no tendrías arrepentimientos?-

ella tenia razón, la tenia y mucha, además de todo lo que menciono igual avía cosas de la vida que aun no había experimentado.

Con temor y dolor comenzó a alzar su dedo y postrarlo en el papel, dudo de seguir avanzando iba a quitarlo cuando sintió una suave mano sobre la suya. –ven déjame te ayudo- dicho esto callo dormido, pero no si antes volver a escuchar la tétrica voz de esa joven.

¿? –fue un placer hacer negocios contigo jajaja ja-

RING RING RING!!!!

Era todo lo que se oía, Jack se levanto pegando de gritos, alterado, apago de un puñetazo la alarma de su reloj , tan fuerte fue su golpe que termino por romperlo.

Intento calmarse, pero no podía, todo en el se sentía diferente, se sentía bien pero algo no iba bien. Su hermana despertó temprano a causa de los gritos que pego desde tan temprano, Jack al ver a su hermana se echo a llorar, la abrazo y se puso a decir que la quería, que la amaba y que perdonara cualquier error que allá cometido alguna vez –Jack?, te sientes bien?- le pregunto su hermana a lo que el dijo –si, no te preocupes, que quieres desayunar hoy?-.

El desayuno fue muy ameno, hace años que no oía reír a su hermana, con un humor extraño subió al autobús, se bajo y fue a sus clase, hay se encontró con Caroline, la abrazo y le conto de su extraño humor, del sueño que tuvo, donde el era asesinado por un extraño sujeto y de cómo escucho una voz que hizo que firmara un contrato.

Caroline –te sientes bien Jack?-

Jack –porque tu también me lo preguntas?, si estoy bien-

Caroline –jeje perdón pero es que, Jack, es imposible que ese sueño fuese real o algo por el estilo-

Jack –lo se pero, todo fue tan real-

Caroline –Jack, pero si tu hablaste conmigo cuando llegaste a casa-

Jack –que?!!-

Caroline –si, no lo recuerdas?-

Jack –pero si no recuerdo nada de lo que me paso después de a verme despedido de ti en el cine-

Luego de eso llego el maestro, Jack ni le ponía atención solo podía pensar en el extraño sueño que tubo y el que no recuerde nada de lo que le paso después del cine.

Maestro –bien alumnos eh aquí a una nueva estudiante, ella no es de esta ciudad así que denle la bienvenida-

Entro al salón una joven alta, piel blanca, cabellos cafés oscuros, ojos negros y un aura de elegancia, sus ropas eran un vestido largo como unos 15 cm arriba de los tobillos, con un delicado y delgado listón morado opaco en el cuello del vestido, un delgado cinturón del mismo color y unas botitas negras.

Todos (sobretodo los chicos) quedaron impactados con la belleza y elegancia de la nueva.

Maestro –bien su nom-

¿? –mi nombre es Julieta Ross, tengo 16 años, es un gusto conocerlos escoria-

y con eso se rompió el encanto, todos quedaron boquiabiertos, lo dijo con tanta naturalidad y frialdad que no se sabría ni que decir.

Maestro –bueno, tu lugar será-

Y nuevamente es interrumpido

Julieta comenzó a caminar por el salón, pero con rumbo asía el frente, Jack levanto la cabeza y se encontró con la sombría sonrisa y mirada de la persona en cuestión.

Julieta –aquí- dijo señalando el lugar de mi compañero de asiento –me sentare al lado de mi sirviente-

Sin más el chico se quito y salió corriendo a algún lugar vacío, Julieta se sentó a mi lado y miro fijamente la clase. No lo podía entender (Jack) quien era esa chica?, cuando la oyó hablar se le retorcieron los huesos, cuando la miro a los ojos se le  detuvo el corazón y de golpe comenzó a avanzar de nuevo, que era todo eso?, porque se sentía así?, de pronto sintió que alguien lo observaba y cuando miro por encima de su hombro se encontró con la penetrante mirada de la joven. Toda la clase intento ignorarla pero por mas que intentara no podía, ella simplemente no lo dejaba de mirar.

El tiempo paso y llego la hora de la salida, Jack quiso salir corriendo pero cuando se vino a dar cuanta se encontraba en la azotea de la escuela.

¿? –es un lindo lugar, te gusta venir aquí?-

Jack –pero quien?-

Hay, encima la reja de protección se encontraba Julieta

Jack –pero como?, quien eres?- dijo con un notable temor en su voz

Julieta –jajaja tranquilo, no te voy a matar-

Jack –matar?-

Julieta –ajaja es que acaso no te acuerdas de mi?-

Jack –“quien es esta persona?”-

Julieta –déjame refrescarte la memoria-

De un momento a otro se encontraba en una habitación oscura, no podía ver nada, luego escucho un disparo y al ver en la dirección de donde provenía ese ruido, vio a algo que lo dejo sin habla, era aterrador. Comenzó a acercarse y pudo ver de cerca su cuerpo ensangrentado, luego la misma voz de esa noche, al alzar la vista puedo ver a Julieta.

Julieta –ya recordaste?-

Se voltio a ver atrás y nuevamente se encontraba en la azotea de la escuela.

Jack –tu-

Julieta –yo te salve la vida-

Jack –eres un demonio?-

Julieta –un neko-yokai-

Jack –un demonio-

Julieta –jajajajaja, que lindo es ver tu cara de miedo-

Jack –me iré al infierno-

Julieta –no-

Jack –que?-

Julieta –cuando muera no te iras al infierno, todo dependerá de mi-

Jack –de ti?-

Julieta –deja te explico-

Julieta: ahora eres mi sirviente, tu cuerpo, alma y demás me pertenece, me serás fiel y devoto, cumplirás cada orden que te de, y a cambio te concederé la inmortalidad-

Jack –inmortalidad?-

Julieta –seguirás vivo hasta que ya no te necesite-

Y con eso se dio cuenta que la vida de la que tanto se quejaba, daría un giro de 360º .

Julieta –ahora, me perteneces-

Por fin lo logro, había muerto, ya no tendría vida, nunca más volvería a ver atrás, desde ahora era el sirviente de un demonio.